Se pensó que este cuadro era el que figuraba en los inventarios del Alcázar de 1666, 1668 y 1701, aunque algunos detalles no encajaban. En otro inventario de 1701 de la Torre de la Parada, pabellón de caza que se encontraba a las afueras de Madrid, se menciona un retrato de un enano con un libro abierto. Además, en el paisaje de fondo se aprecian las formas de La Maliciosa, una característica montaña de la Sierra del Guadarrama que Velázquez ya incluyó en otros retratos pintados para la Torre de la Parada.
El enano de grave expresión y negra vestimenta que Diego de Velázquez retrató con un libro en las manos casi más grande que él no es Diego de Acedo “El Primo“, como se ha creído desde hace más de un siglo, sino un “Bufón con libros” de nombre desconocido. El rostro del famoso «Primo» de la corte de Felipe IV se corresponde con otro viejo conocido de la pinacoteca madrileña, que tradicionalmente se había identificado con Sebastián de Morra.